Hola, me habia dado cuenta que tenia un buen rato de no escribir... como siempre, muchas cosas por hacer y poco tiempo.
Retomando un poco, quisiera compartir un pasaje de Exodo 24, donde vemos hermosamente a Cristo ilustrado de varias maneras (es recomendable leer Hebreos 9, donde se explican varias cosas de este pasaje):
Exodo 24:1-2 Dijo Jehová a Moisés: Sube ante Jehová, tú, y Aarón, Nadab, y Abiú, y setenta de los ancianos de Israel; y os inclinaréis desde lejos.
Pero Moisés solo se acercará a Jehová; y ellos no se acerquen, ni suba el pueblo con él.
Es bien interesante notar, que Dios dijo: "Solo Moises se acercará". Moises en sí fue el elegido de Dios para sacar a su pueblo, designado por Dios, tenía el derecho para acercarse... cuando Cristo vino, vivió una vida perfecta (1 Pedro 2:22) y así se ganó el derecho de acercarse ahora por nosotros, delante de Dios (Hebreos 9:14).
v. 3 Y Moisés vino y contó al pueblo todas las palabras de Jehová, y todas las leyes; y todo el pueblo respondió a una voz, y dijo: Haremos todas las palabras que Jehová ha dicho.
¿De verdad creen que el pueblo iba a cumplir? ¿Podian ellos cumplir TODA la palabra de Dios? Por supuesto que no, pero siempre la arrogancia y el orgullo del hombre se manifiestan, tratando de ganar el favor de Dios con esfuerzos nuestros, cuando Dios no quiere mas que perfeccion 100% y pecado al 0%.
v. 4 Y Moisés escribió todas las palabras de Jehová, y levantándose de mañana edificó un altar al pie del monte, y doce columnas, según las doce tribus de Israel.
v. 5 Y envió jóvenes de los hijos de Israel, los cuales ofrecieron holocaustos y becerros como sacrificios de paz a Jehová
Previendo esto, Moises mandó ofrecer sacrificios... animales inocentes murieron, ¿y saben porqué? Porque para pagar el pecado, es necesario que alguien inocente muera, eso representa la sangre, que vemos en los siguientes versículos.
v. 7 Y tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: Haremos todas las cosas que Jehová ha dicho, y obedeceremos.
De nuevo la arrogancia y atrevimiento del pueblo, ¿de verdad pensaban cumplir toda la ley? Bien enseñaba el apostol Pablo en Galatas 3, que la ley es solo para condenarnos, y que nos deja sin posibilidades para ayudarnos nosotros mismos, y apunta al único medio de salvación, Jesucristo.
v. 8 Entonces Moisés tomó la sangre y roció sobre el pueblo, y dijo: He aquí la sangre del pacto que Jehová ha hecho con vosotros sobre todas estas cosas.
Y para ejemplificar esto, fueron rociados con sangre (imaginense el espectáculo, Moises aventando sangre a medio pueblo). Según Hebreos 9, también roció con sangre el mismo libro de la ley que les leyó... haganse una idea en su mente de la escena. Pero así tenía que ser, porque este pacto que Dios había establecido con su pueblo, tenía que ser a través de la sangre de un inocente, para purificar al pueblo lleno de pecado.
¿Y qué resultado tenemos de esta expiación?
v. 9 Y subieron Moisés y Aarón, Nadab y Abiú, y setenta de los ancianos de Israel;
¿Se fijan? Ya no subió solo Moisés al monto. Ya pudieron subir Aarón, sus 2 hijos mayores y 70 ancianos isrealitas, en representación del pueblo. ¿De donde vino ese derecho a subir, que NO tuvieron cuando Dios ordenó en los primeros 2 versículos que solo Moises subiría?
Ya se había ofrecido expiación por el pecado, ya alguien había muerto para pagar la culpa... hasta entónces, tenemos derecho a subir y ver a Dios.
De la misma manera es con Jesucristo. El murió en la cruz, siendo inocente y sin obligación de ir, fue, cargó y pagó por nuestros pecados, para que podamos tener acceso a Dios... sin esto, NO tenemos derecho de subir y ver a Dios.
v. 10 y vieron al Dios de Israel; y había debajo de sus pies como un embaldosado de zafiro, semejante al cielo cuando está sereno.
¡Qué hermosa visión! Al leer esto, me da envidia, me gustaría ser esos personajes. ¡Vieron a Dios mismo! Las palabras me faltan para expresar el gozo y la alegría que me da pensar que vieron a Dios, y el mismo escrito dice, evidenciando eso ... el piso bajo sus pies dejó de ser tierra y roca, ahora era tan azul, como una piedra finisima, un safiro, tan azul como el cielo cuando está en calma....
Algún día, veré a Dios cara a cara, por el derecho que Cristo compró por mi en la cruz y me otorgó a través de la justificación por su sangre (Romanos 5:9). Ya quiero que sea ese día... pero mientras tanto, debo vivir en esta tierra, buscando honrar a mi Dios y a mi Cristo, esperando ver esa gloriosa visión...
¿Quiéres ver a Dios? Solo a través de la fe en el sacrificio de Cristo puedes. Despójate de toda confianza que tengas en tus obras, tu piedad, tu buen comportamiento, reconócete como pecador, arrepientete y creé en el bendito y glorioso mensaje del Evangelio.
Dios los bendiga!
Retomando un poco, quisiera compartir un pasaje de Exodo 24, donde vemos hermosamente a Cristo ilustrado de varias maneras (es recomendable leer Hebreos 9, donde se explican varias cosas de este pasaje):
Pero Moisés solo se acercará a Jehová; y ellos no se acerquen, ni suba el pueblo con él.
Es bien interesante notar, que Dios dijo: "Solo Moises se acercará". Moises en sí fue el elegido de Dios para sacar a su pueblo, designado por Dios, tenía el derecho para acercarse... cuando Cristo vino, vivió una vida perfecta (1 Pedro 2:22) y así se ganó el derecho de acercarse ahora por nosotros, delante de Dios (Hebreos 9:14).
v. 3 Y Moisés vino y contó al pueblo todas las palabras de Jehová, y todas las leyes; y todo el pueblo respondió a una voz, y dijo: Haremos todas las palabras que Jehová ha dicho.
¿De verdad creen que el pueblo iba a cumplir? ¿Podian ellos cumplir TODA la palabra de Dios? Por supuesto que no, pero siempre la arrogancia y el orgullo del hombre se manifiestan, tratando de ganar el favor de Dios con esfuerzos nuestros, cuando Dios no quiere mas que perfeccion 100% y pecado al 0%.
v. 4 Y Moisés escribió todas las palabras de Jehová, y levantándose de mañana edificó un altar al pie del monte, y doce columnas, según las doce tribus de Israel.
v. 5 Y envió jóvenes de los hijos de Israel, los cuales ofrecieron holocaustos y becerros como sacrificios de paz a Jehová
Previendo esto, Moises mandó ofrecer sacrificios... animales inocentes murieron, ¿y saben porqué? Porque para pagar el pecado, es necesario que alguien inocente muera, eso representa la sangre, que vemos en los siguientes versículos.
v. 7 Y tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: Haremos todas las cosas que Jehová ha dicho, y obedeceremos.
De nuevo la arrogancia y atrevimiento del pueblo, ¿de verdad pensaban cumplir toda la ley? Bien enseñaba el apostol Pablo en Galatas 3, que la ley es solo para condenarnos, y que nos deja sin posibilidades para ayudarnos nosotros mismos, y apunta al único medio de salvación, Jesucristo.
Y para ejemplificar esto, fueron rociados con sangre (imaginense el espectáculo, Moises aventando sangre a medio pueblo). Según Hebreos 9, también roció con sangre el mismo libro de la ley que les leyó... haganse una idea en su mente de la escena. Pero así tenía que ser, porque este pacto que Dios había establecido con su pueblo, tenía que ser a través de la sangre de un inocente, para purificar al pueblo lleno de pecado.
¿Y qué resultado tenemos de esta expiación?
v. 9 Y subieron Moisés y Aarón, Nadab y Abiú, y setenta de los ancianos de Israel;
¿Se fijan? Ya no subió solo Moisés al monto. Ya pudieron subir Aarón, sus 2 hijos mayores y 70 ancianos isrealitas, en representación del pueblo. ¿De donde vino ese derecho a subir, que NO tuvieron cuando Dios ordenó en los primeros 2 versículos que solo Moises subiría?
Ya se había ofrecido expiación por el pecado, ya alguien había muerto para pagar la culpa... hasta entónces, tenemos derecho a subir y ver a Dios.
De la misma manera es con Jesucristo. El murió en la cruz, siendo inocente y sin obligación de ir, fue, cargó y pagó por nuestros pecados, para que podamos tener acceso a Dios... sin esto, NO tenemos derecho de subir y ver a Dios.
¡Qué hermosa visión! Al leer esto, me da envidia, me gustaría ser esos personajes. ¡Vieron a Dios mismo! Las palabras me faltan para expresar el gozo y la alegría que me da pensar que vieron a Dios, y el mismo escrito dice, evidenciando eso ... el piso bajo sus pies dejó de ser tierra y roca, ahora era tan azul, como una piedra finisima, un safiro, tan azul como el cielo cuando está en calma....
Algún día, veré a Dios cara a cara, por el derecho que Cristo compró por mi en la cruz y me otorgó a través de la justificación por su sangre (Romanos 5:9). Ya quiero que sea ese día... pero mientras tanto, debo vivir en esta tierra, buscando honrar a mi Dios y a mi Cristo, esperando ver esa gloriosa visión...
¿Quiéres ver a Dios? Solo a través de la fe en el sacrificio de Cristo puedes. Despójate de toda confianza que tengas en tus obras, tu piedad, tu buen comportamiento, reconócete como pecador, arrepientete y creé en el bendito y glorioso mensaje del Evangelio.
Dios los bendiga!
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